Hora de establecer prioridades

Buenos días

Luego de una interrupción de poco más de dos meses, puedo reactivar este blog para segir compartiendo información y opinión con todos ustedes. Exactamente el 24 de enero de 2020 caí victima del dengue, enfermedad que me llevó casi dos meses de recuperación y cuando todavía no terminaba de reponerme, me tuve que aislar en cuarentena, en la que sigo hasta ahora. Este tiempo me ha ayudado a reflexionar acerca de muchos temas, pero hoy quiero enfocarme en el aspecto financiero, que es el tema del que se trata este blog.

Es bien sabido que ya llevamos varios años sufriendo una importante caída de la economía, que se fue agudizando a partir de los cambios políticos acaecidos por el cambio de gobierno en el 2018. Con esta coyuntura, la crisis se fue haciendo cada vez más fuerte, llegando al 2019 muy debilitada y culminando ese año tremendamente golpeada.

Iniciamos 2020 nada más y nada menos que con una Reforma Tributaria que ha apretado aún más la tuerca hacia los contribuyentes que menos ganan y que más aportan al fisco a través de los impuestos indirectos (IVA e ISC) y a los trabajadores de clase media con la implementación del IRP a las ganancias de capital, impidiéndoles deducir ningún gasto de este tipo de ingresos.

En medio de esa vorágine de depresión de la economía, epidemia del dengue e implementación de la reforma, aparece una crisis sanitaria sin precedentes que no necesito explicar pues, no solo en nuestro país es bien sabido, sino en el mundo entero.

Entre idas y venidas de discusiones de las medidas a tomar por parte del gobierno, no nos queda más que asumir la responsabilidad por nosotros y nuestras familias y tomar aquellas decisiones más convenientes para cada uno, según la situación en que se encuentra. No les daré consejos de qué hacer o no hacer, para eso ya hay bastante información (e inclusive sobre-información) que pueden evaluar cómo más benéficas, buscando el equilibrio entre preservar la salud y la economía personal o familiar.